Dado que las carabinas se consideraban armas policiales, ¿consiguió Alemania conservar la mayoría de sus carabinas después de la firma del Tratado de Versalles?

No fue un gran problema.

El ejército alemán no había sido desmovilizado.

Los soldados simplemente empacaron y se fueron, en algunos casos incluso llevaron artillería ligera con ellos.

Los Freikorps, tan cruciales para los disturbios de la posguerra en Alemania, habían retenido su equipo de las trincheras y no había escasez.

La rebelión de los trabajadores en el Ruhr en 1920 no tuvo problemas para armarse en un grado que les dio el apodo de ‘Ejército Ruhr Rojo’, usando artillería y ametralladoras.

Röhm fue, durante gran parte de la década de 1920, considerado como el ‘Rey de las ametralladoras de Baviera’ que distribuía ametralladoras a los Einwohnerwehren (‘Fuerza de defensa de los habitantes’), y cada pueblo bávaro podía colocar un MG con 2000 balas.

Los Freikorps que luchaban contra los polacos en una guerra no declarada en la frontera oriental estaban bien equipados con rifles, smgs y granadas de mano, aparentemente sin problemas.

TL: DR

En general, Alemania en la década de 1920 estaba tan saturada de armas que tales consideraciones no tenían ninguna consecuencia.